DE PROFESIÓN: HONESTIDAD.En la programación de VEO 7 he podido ver, oír, y disfrutar, de una entrevista hecha a Julio Anguita. No se si era en diferido o no, pero daba gusto oírlo. Hacía años que no lo veía en los medios de comunicación. Está cambiado no solo físicamente . Las zancadillas que a lo largo de la vida el destino te va poniendo, no solo hacen mella en tu aspecto externo sino también en su manera de ver y entender las cosas; sigues pensando lo mismo, creyendo en el mismo credo, diciendo las mismas cosas, pero te cambia el énfasis , el ardor, la pasión con que defiendes aquello en que crees. Lo encontré más sereno. Ha dejado atrás- según mi percepción - aquel tono dogmático que era tan aficionado a emplear en sus discursos, y que a mucha gente asustaba; a mí particularmente me daba rabia porque sabía que aquel dogmatismo aunque fuese verdad lo que estaba diciendo restaba el voto de la gente indecisa que nunca supo ver que él, sabía lo que se debía hacer y cómo hacerlo .Sigue sin morderse la lengua. Me encantó oirle pronunciarse en algunos temas en el mismo sentido en que yo me he pronunciado en este blog y además ¡¡¡es antitaurino !!!.Creo sinceramente que hemos perdido un gran político y seguramente un gran gobernante, pero nunca lo sabremos, porque nunca le dimos la oportunidad de demostrarlo, y debe ser muy frustrante creer en un proyecto político y no tener el respaldo necesario para llevarlo a la práctica . Es una pena que con lo necesitados que estamos de buenos políticos, que Anguita se haya retirado. Opinó sobre la gestión de ZP, sobre la crisis, que dijo que era peor de lo que se nos decía, sobre la corrupción, sobre el caso B. G. y sobre la oposición pasiva, por que nunca da soluciones, de Rajoy, (lo de pasiva es mío )-.
Si yo fuese la presidenta del gobierno en vez de ZP, mandaría a la calle a los 260 asesores personales que tiene y que solo le sirven para aumentar el gasto a través de sus envidiadas nóminas, y contrataría a Julio como mi asesor y a lo mejor otro gallo nos cantara .
En su época al frente del partido hizo una buena oposición, daba caña, no se callaba ni debajo del agua, ahora es muy distinto. Llamazares aparte de estar mudo, hace lo que puede, que es bien poco. Sabemos que tenemos partido comunista, pero no por el ruido que hacen, no por la oposición que llevan a cabo, solo están pendiente de no perder la seguridad de la poltrona.
Anguita a raíz de la muerte de su hijo Julio y de los dos infartos sufridos, dejó la política totalmente. Ahora dedica su tiempo a escribir, a dar conferencias, y participar en aquellos debates que reclamen su presencia. No nos hemos portado bien con el partido comunista de España. Desde su legalización los hemos visto con cuernos y rabo comparándolos con Lucifer, y hemos dado por sentado que de votarlos lo harían tan mal como otras conocidas dictaduras comunistas. Muchas veces me he preguntado cómo estaríamos ahora si le hubiéramos dado a Julio la oportunidad de demostrarnos que otra España es posible, que la corrupción no tiene por qué ser inherente a políticos e instituciones, pero repito, ya nunca lo sabremos. Su proyecto, su idea de otra España más justa, se fué con él.
En la actualidad, después de los años sin él, los comunistas de España son pijos progres, admiradores de las dictaduras comunistas de Cuba, Venezuela, Nicaragua.... Y que están dedicados a la política no por vocación de servicio al pueblo, sino por vocación de servicio a sus bolsillos, a sus egos, al status social.
Sin Anguita perdimos una oportunidad única de construir una España mejor, una España de valores éticos y morales.
A. Del Río. Junio, 2010
